jueves, 5 de febrero de 2009

Qué vergüenza!!

¡¡¡Oh Dios mío!!!... ¡¡¡Qué vergüenza, qué ultraje, qué decepción!!!
¡¡¡Michael Phelps se ha fumao un porro!!! ¡¡¡El fin del mundo se acerca, arrepentíos!!!...

Con la que está cayendo y resulta que al pobre chaval que lleva vete tú a saber cuántos años llevando una vida monacal de entrenamientos, comidas, entrenamientos, descanso y así una y otra vez, se le ocurre darle dos tiros a un porro y no veas la que le montan.
Un deportista que ha ganado todo lo que se puede ganar y más con la edad que tiene, que pa mi es todavía un niñato cagao del culo... Lo pillan dándole dos tiros a un canuto y poco más y lo crucifican...

"Es un mal ejemplo" dirán unos... "Decepcionante" dirán otros... ¿Se puede ser más hipócrita?
Un chaval que lo ha dado todo para llegar a donde ha llegado y que se lo cepillen de esa manera por algo que a su edad es lo más normal del mundo. Hay gente que dirá que deportistas como ellos tienen que dar ejemplo a los jóvenes que vienen. Pues a esa gente les digo: "Que os den por culo, panda de vagos. Ustedes lo que quieren es quitarse de encima la responsabilidad de dar ejemplo ustedes mismos a su propia prole. Es mucho más sencillo que los nenes tengan un héroe al que querer imitar que estar pendientes de educarlos ustedes mismos."

Lo más gracios de todo el tema es que en un 99,9% de los casos, todos esos hipócritas que saltan a la palestra a demonizar al pobre chaval, seguramente serán mucho peores en la intimidad de sus dormitorios, baños o garitos habituales.

Con la que está cayendo y las cosas que hay que oír...

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