Cuando uno ve en la tele la cantidad de gente que sale a las calles para manifestarse por su empleo, su vivienda, su economía, la verdad es que me invade una gran sensación de impotencia, pero cuando veo las cosas que pasan en las grandes empresas y la actitud de las mismas ante la crisis, me vienen las ideas mas oscuras y macabras que se pueden llevar a cabo contra un grupo de seres humanos.
La empresa aseguradora AIG, ahora, después de ser ayudado por el estado norteamericano en multitud de ocasiones (más de 170.000 millones) ahora sale a la luz, que sus directivos, los cuales han ayudado a hundirla, recibirán primas millonarias, y lo más gracioso es que el gobierno americano no puede hacer nada para evitarlo.
Lo primero: Sin ni siquiera ponerse colorados, esta partida de ladrones, no se merece otra cosa que meterlos en la carcel de por vida, porque el mundo se desangra, y los mismos que lo han hundido son los que viven y actuan de esta forma tan descarada ante la mirada impotente del organismo con más poder en el mundo: El gobierno de los EEUU.
Lo segundo: No creo que un estado-imperio capaz de cambiar gobiernos en todo el mundo, someter paises y regular las riquezas de todo un planeta, no sea capaza de parar esta tomadura de pelo que se lleva a cabo inpunemente delante de nuestras narices. Rotundamente, el señor Obama esta muy lejos de ser el salvador que me ha vendido la prensa, esclava mediática de los grandes grupos empresariales, al igual que el propio gobierno de los EEUU.
Por último, quien sabe cuantas empresas habrán llevado a cabo este tipo de disparates. Si no somos conscientes de que la economía debe de estar completamente regulada esto continuará y será el cuento de nunca acabar.
Pero esto no va a cambiar: Seguiremos atacando a los gobiernos que nacionalizan sus recursos y permitiendo que este grupo de ladrones acaben con toda nuestra economía.